Se trata de un anuncio publicitario cuyo formato podría pertenecer a una revista, a un panel publicitario o incluso podríamos encontrarlo como imagen final de algún anuncio televisado. Su formato y tamaño variará dependiendo del medio en el cual lo encontremos.
La mayor parte del espacio del anuncio lo ocupa una imagen, situada detrás del logotipo de la marca “Oscar Mayer”, este hecho nos permite reconocer rápidamente y sin demasiado esfuerzo quién nos está vendido el producto. Se trata de un anuncio donde sus elementos están centralizados, con un pequeño desequilibrio visual hacia la fotografía. El punto geométrico coincide con el punto fuerte de esta, al mismo tiempo, las líneas de interés coinciden con las de fuerza. Esta peculiaridad no es una casualidad, con esta distribución de los elementos pretenden que la mirada del espectador se dirija en un primer lugar hacia el centro del anuncio donde encontramos la imagen, poseedora de toda la información y de tamaño desproporcionado en comparación con el texto. Si hubiera más imágenes o textos, estos desviarían el foco de atención.
No solamente utilizan la posición de los elementos para llamar la atención, sino que el uso del fondo completamente negro permite resaltar los colores de la imagen que coinciden con los del logotipo: amarillo y rojo, colores cálidos que utilizan para destacar las únicas letras del anuncio y que al mismo tiempo les permite unificar imagen y texto, es decir, consiguen una conjunción entre imagen y texto que los hace complementarios a la hora de determinar el significado global del mensaje que se quiere transmitir. El uso de estos dos colores denota juventud, ya que son colores que no pasan desapercibidos, que llaman la atención, son chillones y vivos como los mismos niños y adolescentes.
Por lo tanto, el anuncio posee un esquema compositivo, se nos presenta en un fondo negro donde encontramos una imagen de un frankfurt (el producto que se quiere vender) que pasa a un segundo plano ya que queda situado detrás del logotipo de “Oscar Mayer” cuya importancia parece mayor que el propio producto. Debajo de la imagen, en proporciones mucho más pequeñas se sitúa el texto que actúa como eslogan del anuncio.
El texto nos comunica que hay una página web dedicada al producto y nos invita a entrar en ella y observar el contenido y la información que nos puede proporcionar. Al mismo tiempo, la frase denota jovialidad, “si te diviertes hazlo”, lanza un reto a todos aquellos intrépidos que les gusta la aventura, la diversión, lo desconocido. Ese perfil normalmente lo cumplen los jóvenes por ese motivo creemos que es un producto destinado a un público joven, especialmente a una clase social media, ya que no se trata de una comida elaborada, sofisticada y cara (que nos haría pensar en un nivel social alto). Es un producto disponible para toda la población.
El objetivo principal es lograr que la gente compre el producto ya que una sensación de diversión, alegría, fuerza y vitalidad inundará a todo aquel que lo coma, debido a su intenso sabor y a su autenticidad. Por lo tanto el mensaje que transmiten es que los frankfurt “Oscar Mayer” son un alimento muy bueno, sabroso y fácil de realizar. El motivo por el que el logotipo de la marca es casi tan grande como la fotografía y se encuentra encima de esta, es para potenciar esta marca en concreto, porque hoy en día existen en el mercado una gran variedad de frankfurts y tienen la necesidad que los espectadores recuerden su marca, para que no se confundan a la hora de comprar.
La publicidad se basa en cómo te hace sentir comer un “Oscar Mayer” pero en ningún momento menciona que comer continuamente este producto puede provocar hipertensión o colesterol o que hay que combinarla con una dieta equilibrada y ejercicio. Simplemente potencia este tipo de alimentación que puede llevar al sobrepeso o a la obesidad.
El anuncio no es impactante, es simple y poco elaborado, aun así, esta publicidad nos muestra que en ocasiones la simplicidad es la mejor aliada para dejar claros los conceptos que se quiere transmitir, pero en mi opinión tendrían que buscar otros recursos gráficos, icónicos e incluso buscar un eslogan más impactante para conseguir que al verlo la gente recordara gráficamente el producto y la marca ya que este no llama demasiado la atención, es fácilmente olvidable y es poco creativo.
Me gusta tu comentario, Mar.
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